Sube a 60 el número de muertos en ataques de un grupo ligado al EI en el noreste de la RDC

Kinsasa, 14 jul (EFE).- La cifra de muertos en los recientes ataques perpetrados en varias aldeas del noreste de la República Democrática del Congo (RDC), atribuidos a las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), un grupo rebelde de origen ugandés con lazos difusos con el Estado Islámico (EI), subió de 54 a 60, confirmaron a EFE este lunes fuentes de la sociedad civil.

Los ataques tuvieron lugar entre el 6 y el 9 de julio en la comuna de Oicha, situada en la provincia de Kivu del Norte y fronteriza con el territorio de Irumu, en la vecina provincia de Ituri.

«Esta mañana hemos descubierto seis cuerpos de civiles, víctimas de los ataques perpetrados por los rebeldes de las ADF aquí en Oicha. Esto nos da por ahora un balance provisional de 60 muertos», dijo a EFE el relator adjunto de la sociedad civil en el territorio de Beni (que incluye Oicha), Philippe Bonane.

Bonane advirtió, no obstante, de que las labores de búsqueda continúan y la mayoría de los nuevos cadáveres hallados se encuentran ya en estado de descomposición.

Según el activista, las ADF llevaron a cabo tres ataques: el primero el 6 de julio hacia las 2 de la madrugada y otros dos el 7 y el 9 de julio, en los que varias víctimas fueron asesinadas con machetes y otras con armas de fuego.

Asimismo, aseguró que estas ofensivas habrían sido una represalia por los bombardeos efectuados por los ejércitos congoleño y ugandés contra las posiciones rebeldes, una hipótesis que también sostiene el alcalde de la comuna de Oicha, Jean De Dieu Kibwana, quien declaró a EFE tras los ataques que los agresores actuaron en respuesta a esos bombardeos.

«Es cierto que hay ataques por parte de estos rebeldes, pero pedimos a la población que no ceda. Que siga confiando en la coalición de ejércitos, que ha logrado debilitar a las ADF», añadió el alcalde.

Las ADF son una milicia de origen ugandés que actualmente tiene sus bases en Kivu del Norte e Ituri, donde lleva a cabo frecuentes ataques y siembra el terror entre la población civil.

Las autoridades ugandesas también acusan al grupo de organizar atentados en su territorio y, en noviembre de 2021, los Ejércitos de Uganda y la RDC iniciaron una operación militar conjunta contra los insurgentes.

Sus objetivos siguen siendo imprecisos, más allá de su eventual vinculación con el EI, que en algunas ocasiones se atribuye sus acciones.

Aunque expertos del Consejo de Seguridad de la ONU no han encontrado pruebas de apoyo directo del EI a las ADF, Estados Unidos designó al grupo en marzo de 2021 como “una organización terrorista” afiliada al grupo yihadista.

Desde 1998, el este de la RDC vive un conflicto alimentado por más de un centenar de grupos rebeldes y el propio Ejército, a pesar de la presencia de la misión de paz de la ONU (Monusco). EFE

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