Un británico declarado culpable de querer espiar para Rusia

Londres, 22 jul (EFE).- Un británico de 65 años fue declarado este martes culpable por un tribunal del sur de Inglaterra de intentar filtrar información sensible para el servicio de espionaje de Rusia sobre un antiguo ministro de Defensa del Reino Unido.

En virtud de la Ley de Seguridad Nacional, un jurado del tribunal de Winchester, en el sur inglés, declaró a Howard Phillips culpable de tratar de ayudar a la inteligencia rusa.

Según el juicio, Phillips dijo a dos agentes encubiertos, apodados ‘Sasha’ y ‘Dima’, que les podía proporcionar datos sobre Grant Shapps, extitular de Defensa conservador entre 2023 y 2024, incluidos datos sobre su avión privado, domicilio y número de teléfono.

‘Sasha’ y ‘Dima’ eran en realidad agentes de los servicios secretos británicos, según indicó el tribunal.

Phillips, con domicilio en Harlow (sureste inglés), estaba en proceso de conseguir empleo en la Fuerza Fronteriza del Reino Unido cuando contactó con ‘Dima’ y ‘Sasha’, de quienes erróneamente creyó que eran agentes rusos, informó hoy la Fiscalía en un comunicado.

El británico se reunió con ellos en el hotel London Bridge y después en una cafetería, donde les indicó que usaran la palabra «madre» en lugar de «Moscú» al hablar de sus actividades.

La exmujer del acusado, Amanda Phillips, dijo en el tribunal que él soñaba con ser como el agente secreto James Bond del cine y que solía mirar películas dedicadas a historias sobre los servicios secretos británicos MI5 (interior) y MI6 (exterior).

La jueza Chemma Grubb ordenó hoy que Phillips permanezca detenido antes de que sea condenado en una fecha a establecer el próximo otoño.

La responsable de la División Antiterrorista del Servicio de la Fiscalía, Bethan David, dijo que este proceso legal «envía un mensaje claro a cualquiera que considere espiar o ayudar a Rusia.»

«Howard Phillips describió claramente los servicios que estaba dispuesto a prestar a un estado hostil. Desde obtener un empleo en la administración pública y solicitar una autorización de seguridad, hasta proporcionar los datos personales del ministro de Defensa, Phillips fue descarado en su afán de lucro y no le importó el posible perjuicio para su propio país», añadió.

«Colaborar con un servicio de inteligencia extranjero es un delito penal, independientemente del motivo o de si se logra o no. Siempre intentaremos procesar a cualquiera que represente una amenaza para el Reino Unido», puntualizó. EFE/pddp

vg/er