Una artista panameña evoca en París la crisis migratoria en el Darién
La artista francopanameña Isabel de Obaldía presentó este martes en París una exposición sobre la selva del Darién, entre Panamá y Colombia, que cientos de miles de migrantes intentaron cruzar rumbo a Estados Unidos.
En los pasados tres años más de un millón de personas, en su mayoría venezolanos, cruzaron la inhóspita jungla en su travesía hacia el norte, pese a enfrentar peligros como animales salvajes, ríos caudalosos y grupos criminales.
Pero este año, el flujo de migrantes que transitan por este paso cayó a niveles ínfimos por el temor a las deportaciones masivas ordenadas por el gobierno estadounidense de Donald Trump.
Con telas que muestran la exuberancia de la selva y la fuerza de los ríos, y pequeños personajes en vidrio, De Obaldía presenta en «Y aquí estamos hechos pedazos», en la Maison de l’Amérique Latine hasta el 26 de febrero de 2026, su visión sobre esa zona que separa Sudamérica y Centroamérica.
En la instalación principal, cuatro grandes paneles de colores intensos representan manglares, caminos sinuosos entre una densa vegetación, unas cascadas y una parte de la costa. Al acercarse, el espectador distingue unas pequeñas figuras en vidrio suspendidas delante de la pintura. Estos personajes, en caída libre, parecen querer agarrarse a algo. Algunos tienen gestos dramáticos.
La artista, nacida en 1957 de madre francesa y padre panameño, explica que quería mostrar justamente este contraste.
Primero está «la naturaleza preciosa y de repente te pones a ver cada personaje», dice a AFP. «Hay cosas muy terribles», añade, recordando las duras experiencias que viven los migrantes y que recopiló en sus viajes.
De Obaldía, conocida sobre todo por su trabajo en vidrio, visitó la región del Darién a finales de 2023, en el momento álgido de la crisis migratoria, para conocer la selva y hablar con la gente.
De ahí salió un primer proyecto, que presentó en 2024 en la Bienal de Venecia: una instalación inmersiva para intentar mostrar lo que sienten las personas que cruzan esta ruta.
En abril de 2025, volvió al Darién y se encontró con una zona «fantasma», donde ya casi no había migrantes debido al endurecimiento de las leyes en Estados Unidos. Pero el paso de estos cientos de miles de personas quedó reflejado en la naturaleza, con los restos de chozas y los innumerables residuos.
De Obaldía decidió entonces modificar el proyecto presentado en Venecia y hacerlo más global, para que no sólo hiciera referencia a Panamá, sino a la situación en el mundo, dice esta artista comprometida.
es/mb