El abastecimiento alimenticio en la era de la globalización

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Asegurar el aprovisionamiento alimenticio en una época en que se intensifican los intercambios internacionales constituye un verdadero desafío: requiere una estrategia flexible y continuamente actualizada, así como una organización efectiva, según las autoridades suizas.

La Oficina Federal para al Aprovisionamiento Económico (OFAE) presentó su estrategia en el terreno de la alimentación, en una rueda de prensa ofrecida este jueves en Berna.

Actualmente, los consumidores suizos tienen acceso la oferta de productos alimenticios provenientes de todo el mundo y el consumidor espera cierta seguridad en ese servicio: que los productos que se le ofrecen sean sanos y que no haya ruptura del aprovisionamiento, ni siquiera en caso de crisis.

La OFAE señala que, para garantizar ese aprovisionamiento, se necesita una estrategia flexible y una organización que sea efectiva. En cuanto a la estrategia, reposa en tres elementos: el análisis de los riesgos, la fijación de los objetivos y los instrumentos que hay que utilizar.

Por lo demás, la organización del aprovisionamiento alimenticio impone asociar en la tarea tanto a los importadores de productos alimenticios como a los productores helvéticos, a mayoristas y minoristas.

Para Kurt Streiff, nuevo responsable para al aprovisionamiento económico del país, la cooperación en este campo es siempre vulnerable, porque depende de varios factores.

Por eso, el abastecimiento sólo puede ser garantizado en un marco muy amplio; es decir, que se debe disponer, al mismo tiempo, de la energía, los transportes y el saber hacer y, por otro lado, deben funcionar perfectamente la tecnología de la información y de la comunicación.

En su análisis de los riesgos, el responsable de la alimentación de la OFAE constata que el aprovisionamiento de los productos alimenticios provenientes del mundo entero comporta una serie de riesgos. La catástrofe medioambiental de Chernobil y la reciente epidemia de fiebre aftosa son buenos ejemplos.

Dada la amplitud actual de los intercambios mundiales, no es de extrañar que un siniestro se propague rápidamente y de una manera incontrolada ni que pueda tener consecuencias en el abastecimiento alimenticio de Suiza.

Un mínimo de 2.300 kilocalorías diarias

El objetivo del Estado es asegurar una alimentación fija, un estándar mínimo de calorías por día y por persona, en caso de una crisis de aprovisionamiento.

Los consumidores deben ser tratados al mismo nivel. La OFAE prepara medidas detalladas para los seis primeros meses en una situación difícil.

El responsable del sector de la alimentación, Manfred Bötsch, señala que, en caso de una crisis de aprovisionamiento, se puede satisfacer la oferta requerida: cooperando con el extranjero, recurriendo a la producción interna y liberando las reservas de productos alimenticios.

Informática al servicio de la toma de decisiones

Según Pius Hättenschwiler, de la Universidad de Friburgo, las soluciones informáticas modernas permiten optimizar las diversas tareas del aprovisionamiento.

Para facilitar el trabajo de las autoridades y encontrar rápidamente las soluciones más adecuadas en la materia se están desarrollando sistemas que «faciliten la toma de decisiones».

swissinfo y agencias