Grecia va a trasladar a cientos de migrantes de los campos superpoblados de las islas

Un vehículo de la policía vigila la entrada del campamento de migrantes de Malakasa, al norte de Atenas, el 5 de abril de 2020 afp_tickers

Grecia iniciará el domingo el traslado a su parte continental de cientos de solicitantes de asilo, ancianos o enfermos, que viven en los campos superpoblados de las islas del Egeo, para proteger a estas personas del coronavirus, anunció el jueves el ministerio de Migración.

Según la misma fuente, 2.380 «personas vulnerables» serán evacuadas de estos campamentos a apartamentos, hoteles u otros refugios en el continente.

La operación, cuyos detalles se precisarán más adelante, comenzará el 19 de abril y durará aproximadamente dos semanas.

Las personas afectadas incluyen 200 solicitantes de asilo mayores de 60 años, acompañados de sus familiares, así como un grupo de 1.730 personas que sufren enfermedades previas a la epidemia y también sus familiares, precisó el ministerio.

En los campamentos de las islas de Lesbos, Chios, Samos, Leros y Kos no se han registrado oficialmente casos de infección por el nuevo coronavirus. Sin embargo, se han denunciado varios casos en dos campamentos situados en el continente.

Unos 100.000 solicitantes de asilo se encuentran actualmente bloqueados en Grecia desde que otros países europeos cerraron sus fronteras en 2016. Los más hacinados son los campamentos situados en las islas cercanas a Turquía, con más de 36.000 personas amontonadas en sitios diseñados para acoger a 6.100.

Por su parte, el misionero Maurice Joyeux de la organización Jesuit Refugee Service (JRS) llamó a Europa a «despertar» frente a las «bombas sanitarias» que constituyen los campos de migrantes a la hora del coronavirus, y a transformar «cruceros en centros de acogida para refugiados».

Los campamentos de migrantes, situados en cinco islas griegas del mar Egeo, son «forúnculos en la piel de Europa», declaró el jesuita a la AFP, estimando que constituyen una «bomba sanitaria» que corre el riesgo de explotar en suelo europeo.