Japón eleva alerta de viaje en la frontera de Tailandia y Camboya por los combates

Tokio, 27 jul (EFE).- Japón ha pedido a sus ciudadanos que eviten viajar a las zonas fronterizas entre Tailandia y Camboya por el conflicto armado que ha entrado en su cuarto día consecutivo pese a los llamamientos internacionales para un alto el fuego.

Tokio emitió una advertencia de viaje de nivel 3, el segundo más alto en su escala de cuatro, para las regiones, la cual fue publicada el sábado en el portal oficial de advertencias de viaje de la Cancillería.

La alerta abarca hasta 50 km desde la frontera en el lado tailandés y hasta 30 km desde la frontera en el lado camboyano. También sugiere abandonar la zona a los japoneses que ya se encuentran allí.

La Cancillería subraya que los choques, iniciados el jueves en la disputada línea limítrofe, presentan un alto riesgo de «incidentes imprevistos» y justifican la elevación de la alerta.

Las autoridades estiman que unos 450 japoneses residen en las regiones afectadas, sin que se hayan reportado víctimas entre ellos, según fueron citadas por el medio local NHK.

El conflicto mantiene al menos 32 muertos, decenas de heridos y miles de desplazados, según las últimas cifras oficiales.

Las disputas continúan pese a que los Gobiernos de ambas naciones han mostrado disposición a iniciar negociaciones para un alto el fuego.

El presidente estadounidense Donald Trump dijo la víspera que sostuvo llamadas con el líder de Tailandia, Phumtham Wechayachai, y con su homólogo camboyano, Hun Manet, afirmando que ambas partes «han acordado reunirse de inmediato y negociar rápidamente un alto el fuego».

Los mandatarios de ambos países asiáticos confirmaron que mantuvieron conversaciones con el presidente estadounidense y le agradecieron su interés en poner fin a las hostilidades.

Bangkok y Nom Pen mantienen una antigua disputa territorial debido a desacuerdos sobre la delimitación de su frontera, origen de varios choques como los combates esporádicos ocurridos entre 2008 y 2011 que causaron alrededor de una treintena de muertos.

La tensión volvió a escalar el pasado mayo tras la muerte de un soldado camboyano en un enfrentamiento entre ambos Ejércitos. EFE

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