Las grandes cantantes brasileñas animan última jornada del Rock in Río

Río de Janeiro, 11 sep (EFE).- Dos de las mayores cantantes brasileñas, Ivete Sangalo y Ludmilla, pese a representar ritmos populares muy distantes del rock, fueron responsables por poner a bailar a los 100.000 asistentes a la última jornada de la actual edición del Rock in Río, que concluye este domingo en Río de Janeiro.

En una jornada exclusiva para artistas mujeres que cuenta como grandes atracciones a la cantante británica Dua Lipa y a las estadounidenses Megan Thee Stallion y Macy Gray, las brasileñas fueron responsables por iniciar, con mucha animación y baile, los conciertos en los principales escenarios del Rock in Río.

En la lista de grandes artistas brasileñas invitadas para la jornada de empoderamiento femenino del festival tan solo faltó la cantante Anitta, ya que hasta Elza Soares, que murió en enero pasado a los 92 años aún activa y tras haber sido considerada la mayor voz del país, estuvo presente con un homenaje.

Ivete Sangalo, en su decimoséptima participación en el festival, incluyendo ediciones en Río de Janeiro, Lisboa y Madrid, abrió los conciertos en el escenario Mundo, el principal del festival, con una presentación que montó especialmente para conmemorar sus 50 años.

Para mostrar el espíritu del festival, la cantante del estado de Bahía apareció en el escenario tocando una guitarra e interpretando la introducción de «Sweet Child O’ Mine», de Guns N’ Roses, banda que se presentó el pasado jueves, pero enseguida enmendó con varios de sus principales éxitos.

La reina de la música axé cumplió su propósito de poner al público a saltar con animadas interpretaciones de canciones como «Festa», «Tempo de Alegria» y «Sorte Grande».

Ivete destacó la iniciativa de los organizadores del festival de dedicar una jornada exclusivamente a las artistas mujeres y dijo que la idea de que «la fuerza femenina es poderosa» la tiene desde su infancia y la aplica en su carrera.

La funkera Ludmilla, por su parte, fue la encargada de poner fin a los conciertos en el Sunset, el segundo escenario en importancia de festival, y lo hizo con un concierto en el que no solo recordó sus principales éxitos de funk y pop, sino que presentó sus canciones más recientes, más cercanas al samba.

Fue en el Sunset que las cantantes Majur, Agnes Nunes, Mart’nália, Gaby Amarantos y Larissa Luz homenajearon a Elza Soares con un concierto en el que recordaron toda su trayectoria, sus principales éxitos y su lucha contra el prejuicio que sufren las mujeres negras.

Las presentaciones en el Sunset fueron abiertas por la cantante brasileña Liniker Barros, primera travestí en ofrecer una presentación individual en uno de los escenarios principales del Rock in Río, y que aprovechó su concierto para salir en defensa de travestis y mujeres negras.

«Me emociona poder entregar un trabajo con dignidad y excelencia para ustedes. Dicen que mujeres negras, travestis y homosexuales no pueden, pero sí podemos. Y estamos aquí para mostrar que podemos hacerlo con excelencia», dijo.

Lexa, otra de las grandes representantes del funk carioca y autora de éxitos como «Sapequinha» y «Cavalgada», fue la responsable por animar al público en el escenario Favela.

La nueva edición del Rock in Río, la vigésima primera en su historia y la novena en la ciudad brasileña en donde nació en 1985, concluyó este domingo tras siete jornadas de música. El festival contó con conciertos los 2, 3, 4, 8, 9, 10 y 11 de septiembre.

En la edición de este año se presentaron bandas como Iron Maiden, Guns N’ Roses, Coldplay, Green Day, Justin Bieber, Demi Lovato, Dua Lipa, Post Malone, Camila Cabello y Avril Lavigne. EFE

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