Netanyahu culpa a la oposición de aprobar la lectura preliminar para anexionar Cisjordania
Jerusalén, 23 oct (EFE).- El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró que la aprobación el miércoles en una primera lectura en el Parlamento de un proyecto para anexionar Cisjordania fue «una provocación deliberada» de la oposición para crear discordia durante la visita del vicepresidente de EE.UU., JD Vance, a Israel.
«La votación de la Knéset (Parlamento) sobre la anexión fue una provocación política deliberada por parte de la oposición para sembrar discordia durante la visita», señaló un comunicado de la oficina de Netanyahu, añadiendo que ese proyecto de ley y otro «fueron patrocinados por miembros de la oposición».
El gobernante aseguró que su partido, el Likud, y las formaciones religiosas que conforman la coalición no votaron por los dos proyectos aprobados de manera preliminar y que aún requerirían otras votaciones: el de anexión de Cisjordania, que salió adelante con 25 votos a favor y 24 en contra; y el de anexión del asentamiento de Maale Adumim, que avanzó con 32 a favor y nueve en contra.
Sin embargo, miembros de formaciones clave en la coalición de Gobierno de Netanyahu como Sionismo Religioso (la formación encabezada por Bezalel Smotrich) o Poder Judío (liderada por Itamar Ben Gvir), apoyaron estas mociones, según la prensa israelí.
En su comunicado, Netanyahu reconoce que uno de sus miembros, Yudi Edelstein, votó a favor de la anexión a pesar del llamamiento en el Likud a la abstención en la votación. El partido le retiró de su posición en el Comité de Defensa y Asuntos Exteriores de la Knéset en respuesta, según el diario The Times of Israel.
«Sin el apoyo del Likud es poco probable que estos proyectos lleguen a algún sitio», concluye el jefe de Gobierno.
Antes de abandonar Israel esta mañana, Vance dijo sentirse insultado personalmente por la votación, después de que la Administración del presidente Donald Trump en Estados Unidos reiterara en numerosas ocasiones previas que la anexión no se produciría.
«Cisjordania no va a ser anexionada por Israel, la política de la Administración Trump es que Cisjordania no va a ser anexionada por Israel, esa va a seguir siendo nuestra política», insistió Vance antes de partir.
En septiembre, el ministro de Finanzas israelí y miembro clave de la coalición de Gobierno, Bezalel Smotrich, presentó un plan para que Israel se anexione el 82 % de Cisjordania, en respuesta a la oleada de reconocimientos al Estado de Palestina que se estaba produciendo.
Días antes, el Ejecutivo de Netanyahu había logrado aprobar un plan para expandir el asentamiento de Maale Adumim (ilegal, al igual que el resto de la ocupación israelí en Cisjordania) con la construcción de miles de viviendas sobre territorio palestino.
«Hablarán de un sueño palestino, nosotros seguiremos construyendo una realidad judía», dijo entonces Smotrich.
En la firma junto al alcalde de Maale Adumim del acuerdo marco para la expansión de este asentamiento, Netanyahu sentenció: «Esta tierra es nuestra».EFE
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