
Ultraderecha presenta un programa de «tolerancia cero» con inmigración ilegal para Lisboa
Lisboa, 28 jul (EFE).- El partido ultraderechista Chega presentó este lunes su programa electoral para las elecciones municipales de octubre en Lisboa centrado en «tolerancia cero» con la inmigración ilegal y en políticas para «devolver la ciudad a los lisboetas» que prioricen a los portugueses por encima de los inmigrantes.
«Lisboa ha dejado de reconocerse a sí misma, nuestra ciudad está rendida al desorden, a la corrupción, a la propaganda, a la mentira de lo políticamente correcto, a la incompetencia disfrazada de moderación», describió el candidato de la extrema derecha al Ayuntamiento de la capital portuguesa, Bruno Mascarenhas.
En su presentación estuvo acompañado por el líder de Chega, André Ventura, y garantizó que adoptarán una política de «tolerancia cero con la ocupación ilegal, con la inmigración ilegal y con el compadrazgo», porque «Lisboa no es un campo de experimentos multiculturales, es el hogar de los portugueses».
En materia de vivienda, prometió que Chega construirá 4.500 viviendas asequibles para familias portuguesas y convertirá «al 50 % de los inquilinos municipales en propietarios», a la vez que acabará con «el hacinamiento de viviendas».
En cuanto a seguridad, la ultraderecha prometió reforzar la policía municipal con 300 nuevos agentes y «aumentar las competencias de los tribunales arbitrales municipales para que decidan rápidamente sobre inmigración, alquileres abusivos y ocupaciones ilegales».
«Quien no respeta la ciudad y a los lisboetas no puede quedarse en Portugal», aseveró el candidato en su discurso, que se caracterizó por los continuos ataques a la inmigración.
Entre otros, también prometió una revolución tecnológica, implementar un control de residuos, reducir los plazos de concesión de licencias y garantizar «trazabilidad y transparencia en todas las decisiones administrativas».
Por otro lado, también garantizó guarderías y centros de educación infantil gratuitos «para todas las familias portuguesas», subrayó.
«Quien camina por las calles de Lisboa ve lo que las oficinas de los partidos del sistema no quieren ver: la basura acumulada, la creciente inseguridad, jóvenes sin hogar, portugueses discriminados y servicios públicos colapsados», lamentó el candidato.
Y continuó: «Queremos devolver Lisboa a los lisboetas; queremos una ciudad donde los jóvenes puedan quedarse, donde los ancianos y sus nietos se sientan seguros, donde la política sea limpia, donde la vivienda sea accesible, donde el futuro no sea un lujo, sino un derecho, y donde la cultura sea portuguesa». EFE
lmg/ad
(foto)