Los habitantes de un pueblo suizo evacuado pueden volver a entrar brevemente
Los habitantes de un pueblo suizo amenazado por un enorme desprendimiento de rocas pudieron regresar el miércoles por primera vez desde que fueron evacuados el mes pasado, pero sólo para visitas de 90 minutos.
Las autoridades locales permitieron la entrada de un máximo de 30 personas a la vez en el pueblo de Brienz/Brinzauls para que pudieran recuperar artículos de primera necesidad de sus casas. En el pueblo viven unas 100 personas.
Los residentes debían registrarse con antelación, y sólo dos personas por hogar podían realizar la visita. Un funcionario local declaró a la agencia de noticias Keystone-SDA que el ambiente entre los habitantes del pueblo era alegre, y que estaban “contentos de poder recuperar brevemente”.
Brienz/Brinzauls está situado en el cantón de los Grisones, al sureste de Suiza, a unos 1.150 metros de altitud.
El pueblo fue evacuado el 12 de mayo después de que expertos en geología advirtieran de que una masa de dos millones de metros cúbicos de roca que se cernía sobre el pueblo podía desprenderse.
Las autoridades dijeron entonces que los expertos veían un 60% de posibilidades de que la roca se desprendiera en trozos más pequeños que podrían no alcanzar el pueblo o el valle, pero también un 10% de posibilidades de que toda la masa se desplomara, amenazando vidas y propiedades.
Dijeron que los residentes podrían volver de vez en cuando, dependiendo del nivel de riesgo, pero no pasar la noche.
No se sabe si los habitantes podrán regresar permanentemente y, en caso afirmativo, cuándo.
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