Las cifras que marcaron el debate del WEF en 2024

Sam Altman, consejero delegado de OpenAI y creador de ChatGPT, es uno de los pioneros de la IA que más atención atrajo durante la reunión anual del WEF celebrada en Davos. © Keystone / Gian Ehrenzeller

La Inteligencia Artificial ocupó un lugar estelar en el Foro Económico Mundial (WEF en inglés) en 2024, eclipsando temas como las guerras de Gaza y Ucrania o el cambio climático. Todas las cámaras apuntaron a Sam Altman, consejero delegado de OpenAI y creador de ChatGPT, quien concentró más titulares que los líderes de Oriente Próximo. El comercio y los futuros procesos electorales también tuvieron un espacio destacado en la agenda de Davos de este año.

Temperaturas gélidas, carreteras resbaladizas y botas sucias, los participantes en la 54ª edición del WEF tuvieron que desafiar las rudas condiciones climatológicas que ofreció Davos durante una semana. Pero ni las condiciones meteorológicas ni la crisis climática fueron un tema relevante en las conversaciones sostenidas en el resort alpino.

A continuación, las grandes cifras que marcaron el debate en la reunión anual del WEF en 2024.

83 países

Un total de 83 países y organizaciones internacionales se unieron a las conversaciones para promover la paz en Ucrania celebradas antes del inicio oficial de la reunión anual del WEF. El número de países que aceptaron sentarse a la mesa fue ya un logro en sí mismo, según Ignazio Cassis, ministro de Asuntos Exteriores de Suiza. Pero esto tampoco significa que el acuerdo para un plan de paz detallado esté cerca. China, un actor clave en el proceso, no participó en esta mesa de debate y desairó una invitación para reunirse con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en Davos, según los informes disponibles.

Para Suiza, no obstante, esta reunión fue un espaldarazo a su reputación mediadora. La reunión de los consejeros de Seguridad Nacional y la primera visita al país del presidente Zelenski desde que comenzó la guerra -hace casi dos años- concedieron a Suiza un rol potencialmente relevante en futuras conversaciones de paz. Para más detalles, lean el siguiente artículo de nuestro compañero Matt Allen.

Independientemente de los logros futuros, uno de los temas abordados todo el tiempo por los participantes (y los taxistas) en Davos fue el del tráfico que provocaba Zelenksi en cada sitio que visitaba. Su estatus de celebridad y el numeroso séquito de seguridad que le acompañaba interrumpieron el tráfico en múltiples ocasiones durante su visita.

100+ sesiones

En el WEF del 2024 se habló ampliamente sobre la Inteligencia Artificial. En el programa oficial se contemplaron más de 50 sesiones dedicadas a la IA y alrededor de 70 que fueron organizadas por la AI House, que es una alianza estratégica patrocinada por la EPFL, otras instituciones académicas, empresas y la Comisión Europea, entre otros. Lo anterior sin contar las reuniones que tuvieron lugar informalmente en la Promenade Davos.

Una parte importante de las conversaciones giró en torno a cómo gobernar la tecnología y garantizar la transparencia e inclusión. El secretario general de la ONU, António Guterres, exhortó a los países a tomar medidas pronto para contrarrestar los alcances de las empresas tecnológicas que “persiguen beneficios despreciando los derechos humanos”.

Algunos pioneros tecnológicos presentes en Davos decidieron darle un toque de realismo al boom que vive la IA. Sam Altman, director de OpenAI, creadora de ChatGPT, dijo ante el WEF que la IA es “un sistema que a veces acierta; otras, es creativo, pero a menudo se equivoca totalmente”. Yann LeCun, director de investigación sobre IA de Meta, también intentó apaciguar la euforia que rodea a la IA al expresar en la AI House: “no estamos cerca en absoluto de la inteligencia humana” y añadió que se daría por satisfecho con ver “algo tan inteligente como un gato” cuando él llegue al final de su carrera profesional.

4 jefes de Estado

Cuatro jefes de Estado de Oriente Medio -Irak, Jordania, Qatar e Israel- estuvieron presentes en Davos, colocando en la agenda del día la guerra de Gaza y la amenaza de una expansión del conflicto regional. Fueron múltiples los llamados para un alto al fuego, para el fortalecimiento de la ayuda humanitaria y la búsqueda de una solución entre los dos Estados enfrentados, pero el conflicto de esta región fue eclipsado por los debates sobre la IA. Si acaso se logró algún avance diplomático en Davos fue a puerta cerrada.

El presidente de Israel, Isaac Herzog, declaró ante la audiencia presente que no “niega la tragedia humana de Gaza”, pero que su país tiene “derecho a defenderse” tras los ataques recibidos el 7 de octubre. En tanto, el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Hossein Amir-Abdollahian, advirtió que los ataques contra Israel continuarán si no hay un cese al fuego en Gaza. “El fin del genocidio en Gaza conducirá al fin de las acciones militares y las crisis en la región”, dijo. 

Y también en el contexto de la IA, se abordaron temas como el uso de drones o las armas autónomas letales que cambiarán la forma en la que son libradas las guerras. Una de las advertencias más aterradoras fue hecha por Stuart Russell, experto en armas autónomas, quien expresó en AI House que con la ayuda de la inteligencia artificial puede producirse un arma letal por menos de 20 dólares “haciendo posible que cualquiera tenga acceso a un arma de destrucción masiva”.

3 grados centígrados

De acuerdo con un reporte de la ONUEnlace externo publicado en noviembre, el planeta se calentará casi 3 grados centígrados antes del año 2100, lo que causará grandes estragos en nuestra salud, pero también en el suministro de alimentos, la biodiversidad y las economías.

Pese al oscuro panorama expuesto, estas inquietudes no generaron las ambiciosas promesas de una lucha contra el cambio climático como sucedió en pasadas reuniones del WEF. Incluso el enviado especial de Estados Unidos para el Clima, John Kerry, admitió su frustración en una de las sesiones del WEF. “Intento encontrar cada día la forma de comunicar a la gente la urgencia del tema y por qué tenemos que tomarnos en serio lo que nos dicen los científicos y la madre naturaleza”.

Hubo muchas sesiones dedicadas a la crisis climática y se habló mucho de la necesidad de invertir en la transición energética. Pero esta vez nadie dijo a las empresas en Davos que “la casa está ardiendo”, como hizo la activista climática sueca Greta Thunberg en 2019. El hecho de que hubiera pocos jóvenes en las calles y en los escenarios del WEF podría ser una de las explicaciones del por qué el cambio climático recibió menos atención.

Pero sí se habló del llamado “silencio verde” (green hushing), una práctica de las empresas que consiste en emprender acciones amigables con el medioambiente que no son comunicadas al público por temor a que sean insuficientes o que no estén siendo realizadas de forma correcta. “Los directivos de las empresas pueden dudar a la hora de mostrar lo que hacen porque el tema de la sostenibilidad se ha politizado mucho”, declaró a SWI Patrick Odier, antiguo socio del banco privado suizo Lombard Odier y actual presidente de Building Bridges y Swiss Sustainable Finance.

2.9% de aumento

Las perspectivas del economista jefe del WEF anticiparon un panorama sombrío en 2024. El crecimiento económico del año pasado se situó alrededor del 3% y este año descendería al 2,9%. Lo que más preocupa a muchos economistas en Davos es la ralentización del comercio, que ha sido uno de los motores claves del crecimiento en años previos. Pero la pandemia y la guerra de Ucrania, sumadas a cuellos de botella relacionados con el transporte marítimo de mercancías en la zona del Mar Rojo y el Canal de Suez, son factores que están obstaculizando y quitando ritmo al comercio.

Los economistas presentes apuntaron un dedo flamígero hacia las medidas proteccionistas, que crecieron 38% en 2023. Uno de los principales temas de debate fueron las medidas adoptadas por Estados Unidos y Europa con respecto a los semiconductores fabricados preponderantemente en Taiwán. Los representantes políticos estadounidenses no tuvieron empacho en citar a la seguridad nacional como la razón clave para prohibir la exportación de chips a China.

Los europeos tampoco tuvieron reparo al defender la necesidad de proteger algunas de sus industrias. “Con la Ley Europea de Chips expresamos por primera vez que necesitamos contar con una cadena de suministro (que no dependa del extranjero) porque esto es fundamental para nosotros desde el punto de vista estratégico”, declaró la ministra holandesa de Economía, Monique Adriaansens. “Creo que Europa debería ir más lejos cuando se trata de bienes estratégicos”.

4.000 millones de personas

Es el número de personas que acudirán a las urnas este año. La cifra supera a cualquier otra que se haya esperado en este frente en la historia. Cinco de las seis mayores democracias del mundo celebrarán elecciones: India, Estados Unidos, Bangladesh, Pakistán e Indonesia.

Esto hace del 2024 una verdadera prueba para la IA porque uno de los temas clave debatidos en el WEF es como la inteligencia artificial, los chatbots, los audios y los vídeos falsos podrían amenazar la democracia y facilitar la propagación del nacionalismo y de la desinformación (a través de información falsa y de mensajes que pueden ser ciertos, pero que son difundidos con el objetivo deliberado de crear miedo entre la gente). Los expertos del WEF advirtieron del creciente riesgo que existe de que se utilicen mensajes dedicados a manipular la opinión de los votantes y que se difundan también mensajes automatizados con información falsa a escalas nunca vistas en el pasado.

La ciberseguridad y los sistemas de IA capaces de detectar los mensajes falsos o manipuladores que circulan en Internet serán, por tanto, fundamentales para proteger a las democracias de las amenazas que plantea la IA. Hay que invertir en el día a día para reducir estas amenazas, afirmó Alexandra Reeve Givens, directora general del Centro para la Democracia y la Tecnología.

0% de crecimiento en exportaciones

El crecimiento de las exportaciones chinas fue prácticamente nulo en 2023, uno de los muchos signos de que su economía se transforma. Con sectores como el inmobiliario y el manufacturero en declive, China necesita encontrar un nuevo motor de crecimiento, afirmaron los expertos del WEFEnlace externo.

El número dos de China, Li Qiang aprovechó su estancia en Davos para desplegar una elocuente ofensiva estratégica que puso en relieve todas las ventajas que tiene su país. Ante un auditorio repleto expresó que “elegir invertir en el mercado chino no es un riesgo, sino una oportunidad”. Y para disipar las inquietudes que genera la ralentización de la economía, Li Qiang enumeró una serie de buenas noticias chinas, como un crecimiento económico del 5,3% en 2023.

Belén Garijo, directora general de la farmacéutica estadounidense Merck, participó en una mesa redonda en la que afirmó que el verdadero reto de las empresas actualmente es lograr un equilibrio entre la seguridad nacional, la resiliencia y el crecimiento. En su opinión, China es una “oportunidad de negocio muy atractiva… pero (las empresas) necesitamos normas confiables, competencia leal… y que haya condiciones equitativas para las empresas internacionales”.

800 mujeres

Es el número de mujeres que figuraron en la lista oficial de participantes del WEF. Aunque un portavoz del Foro aseguró con son más que en cualquiera otra edición del encuentro de Davos, la realidad es que equivalen al 28% de los 2.800 asistentes. Su presencia fue especialmente escasa en la sesión plenaria. La presidenta suiza, Viola Amherd, y la comisaria europea, Ursula von der Leyen, fueron las únicas mujeres que pronunciaron conferencias magistrales, de las 10 que hubo este año.

Pese a estas cifras, el tema de la igualdad de género estuvo presente en muchos debates del WEF. Una de las principales razones es que la gente comenzó a darse cuenta de que se requieren cifras que reflejen realmente la diversidad de la población mundial si se desea que haya posibilidades reales de eliminar los prejuicios y de obtener respuestas que tengan credibilidad vía el uso de la IA.

El tema de la representatividad por género es especialmente importante en el ámbito de la salud, en donde se carece de estadísticas sobre si los nuevos fármacos funcionan y son igual de seguros para las mujeres que para los hombres, expresó Antonella Santuccione Chadha, directora del Women’s Brain Project. Según un informe publicado en el WEFEnlace externo, subsanar las deficiencias sanitarias de las mujeres podría impulsar la economía mundial en el equivalente a 1 billón de dólares anuales de aquí a 2040.

10.000 GPU

Esa es la cantidad de unidades de procesamiento gráfico (GPU) del superordenador que se construye en Suiza. Se trata del mayor superordenador del mundo dedicado a alimentar modelos de IA.

Esto concede a los científicos suizos acceso a una potencia de cálculo que solo está al alcance de unas cuantas empresas tecnológicas gigantes “que controlan (estos equipos) a puerta cerrada”, dijo Antoine Bosselut, jefe del laboratorio de procesamiento del lenguaje natural de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL).

Durante los trabajos del WEF, Suiza también puso en marcha una red internacional de computación e IA cuya meta es que las tecnologías de IA sean accesibles para todo el mundo. “Necesitamos activar un sistema que permita a los países que hoy no se benefician de las capacidades y aptitudes de la IA sumarse a los proyectos que les son viables”, declaró Alexandre Fasel, secretario de Estado del Departamento Federal de Asuntos Exteriores de Suiza.

113,60 CHF (francos suizos)

Es el monto que tuvieron que pagar las periodistas que aquí escriben por un taxi que recorrería sólo 7 kilómetros. El triple del precio “normal”. Ciertamente, parte de la culpa la tiene el tiempo que pasamos atrapadas en el tráfico, pero cabe preguntarse hasta qué punto los precios son abusivos en Davos.

Los asistentes al WEF lamentaron la dificultad de encontrar alojamiento asequible en la ciudad. En una investigación de nuestros compañeros de la radio pública suiza SRF se encontraron apartamentos de hasta 40.000 francos suizos por 5 noches. Incluso Alois Zinggli, director general del WEF, declaró al Tages-Anzeiger haber visto precios desmesurados.Enlace externo

Texto adaptado del inglés por Andrea Ornelas/Carla Wolff