Latinoamérica apunta a protección social universal y a un gasto más eficiente
Cuenca (Ecuador), 30 sep (EFE).- Latinoamérica se comprometió este viernes a ampliar sus programas de protección social para hacerlos universales, inclusivos y financieramente sostenibles, así como a aumentar el financiación del desarrollo sostenible con una gestión más efectiva de los recursos.
Estos son algunos de los principales compromisos adoptados por las delegaciones de 33 países que suscribieron la Declaración de Cuenca, el documento con el que se cerró el decimocuarto Foro Ministerial de Desarrollo Sostenible de América Latina y el Caribe, desarrollado en esa ciudad del sur de los Andes de Ecuador.
El encuentro sirvió para confluir en la necesidad de reforzar los esfuerzos de la región para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de la Agenda 2030 después de que la pandemia de la covid-19 y la actual crisis económica hayan hecho retroceder algunos indicadores de la región en casi una década.
El documento recoge una de las principales lecciones dejadas por la pandemia en Latinoamérica, cuyos sectores más vulnerables, principalmente aquellos que carecían de cobertura de programas de protección social, se vieron seriamente afectados y sin una red de seguridad proporcionada por los Estados.
Por ello, la Declaración de Cuenca apunta a ampliar esa cobertura “de manera financieramente sostenible, bajo un pacto social y un contrato fiscal que se forje colectivamente, y donde estén protegidos independientemente de su posición en el mercado laboral”, ya sea formal o informal.
El objetivo con ello es “anticipar diversos riesgos” y contar con “mecanismos efectivos de mitigación de los efectos negativos que puedan enfrentar la población, con un enfoque de prevención, preparación y resiliencia”.
MÁS COOPERACIÓN Y RECURSOS
En este foro organizado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), los países participantes convinieron en “promover más iniciativas de cooperación regional y recursos entre los diferentes actores del desarrollo para frente a problemas sistémicos”.
En ese aspecto, los firmantes del documento abogaron por “diseñar estrategias para aumentar y hacer un uso más efectivo de los diferentes tipos de financiamiento para el desarrollo sostenible”.
Entre esas iniciativas apuntaron a “impulsar políticas públicas y alianzas que estimulen el desarrollo sostenible del sector productivo” y a “coadyuvar a un clima favorable para las inversiones, con esfuerzos para fortalecer la gobernanza y la institucionalidad y construir sistemas tributarios más justos y marcos regulatorios eficientes y transparentes”.
Asimismo, las delegaciones de cada nación de Latinoamérica y el Caribe renovaron su compromiso en “fortalecer la gobernanza efectiva” bajo el principio de “no dejar a nadie atrás”, basado en “una mayor colaboración entre todos los niveles de gobierno y otros actores interesados”.
En ese sentido, reconocieron la importancia de los gobiernos regionales y locales para desarrollar políticas públicas que encaminen a los países hacia las metas de la Agenda 2030.
“ACTUAR CON URGENCIA”
Durante la clausura del foro, el director del PNUD para América Latina y el Caribe, Luis Felipe López-Calva, manifestó su satisfacción por las conclusiones adoptadas en la primera reunión de este tipo celebrada de manera presencial desde el inicio de la pandemia.
Durante las dos jornadas de debates y exposiciones también se llevó a cabo la Quinta Reunión de la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre Desarrollo Social de América Latina y el Caribe, organizada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Precisamente, el secretario ejecutivo adjunto para la Administración y Análisis de Programas de la CEPAL, Raúl García-Buchaca, señaló en la clausura que “estas crisis son una oportunidad” y un llamado a “actuar con sentido de urgencia” porque “respuestas desde el ámbito público no se pueden hacer esperar”.
“Nos llena de esperanza cómo la Agenda 2030 se ha consolidado como el marco de referencia para la construcción de los planes nacionales de desarrollo. Sus objetivos, principios y metas continúan guiándonos como la brújula para alcanzar un verdadero desarrollo sostenible e inclusivo”, añadió García-Buchaca.
En el foro también se acordó que la reunión del próximo año tenga lugar en Chile durante el segundo semestre de 2023. EFE
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